10 estrategias para
derrotar al estrés
Herramientas para luchar con las presiones diarias
de la vida.
por Harry Edelson
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El estrés es bueno. Sí, leíste bien. Pero al igual
que todo, puede volverse peligroso cuando se encuentra en exceso y comienza a
perjudicar tu bienestar mental y físico. El estrés es parte de la vida y es
algo con lo que todos tenemos que lidiar a diario. De acuerdo al Instituto
Americano de Stress, el 80 por ciento de los trabajadores han reportado sentir
estrés en el trabajo y casi la mitad ha dicho necesitar aprender a manejarlo.
A mis
jóvenes 80 años, me enorgullece decir que logré mantener una actitud positiva
incluso durante la intensa presión de trabajar en la industria financiera
durante más de 40 años. Con el tiempo, desarrollé técnicas para ayudarme a
lidiar con las presiones cotidianas de la vida y permanecer positivo. Mi
familia, mis amigos y mis colegas notaron tanto mi positivismo que me gané el
sobrenombre de ‘alegre Harry’.
Utiliza
estas estrategias para conquistar el estrés y permanecer con una actitud
positiva:
1. Piensa
y háblate a ti mismo con optimismo
Es
sorprendentemente fácil eliminar los pensamientos negativos por medio de
enfocarnos en imágenes, eventos o ideas optimistas. Utiliza esos pensamientos e
imágenes optimistas para construir la confianza en ti mismo. Cuando te sientes
confiado en tus habilidades, el trabajo no es tan estresante. Si dudas de tus
capacidades y comienzas a sentir estrés y ansiedad en el trabajo, tómate un
descanso para recomponerte. Ve al baño, mírate en el espejo y repite un mantra
positivo que inspire confianza.
2. Haz
ejercicio y ten una vida activa
Una de
las mejores maneras de lidiar con el estrés es canalizarlo en una dirección
positiva, como el ejercicio. Incluso tomarse un breve descanso en el trabajo
para hacer un poco de ejercicio y poner tu cuerpo en movimiento puede ayudarte
a aliviar el estrés durante el día. Cuando ejercitas, tu cuerpo libera
endorfinas, que le comunican felicidad al cuerpo. Las endorfinas ayudan al
cuerpo a lidiar con el estrés y el dolor. Permanecer activo y ejercitar a
diario te ayudará a disminuir tu nivel de estrés no sólo en el trabajo, sino
también en todos los aspectos de tu vida.
3.
Desarrolla tu capacidad para leer con rapidez
Descubrí
que una de las grandes ventajas que tuve en mi carrera fue mi capacidad para
leer con rapidez. Usando esta técnica, pude leer más informes legales y
documentos laborales que los demás. Esta habilidad me hizo más eficiente,
permitiéndome lograr más. Leer con velocidad no sólo es una capacidad favorable
para el trabajo, sino también para la vida personal. Muchas personas se sienten
tan abrumadas por la cantidad de lectura que debe realizarse para el trabajo o
la escuela, que rara vez tienen tiempo para sentarse y leer por placer. Dominar
la técnica de lectura rápida aumentará tu eficiencia en el trabajo, al tiempo
que liberará tiempo para que leas con la misma eficacia, pero por placer.
4. Fija
objetivos para progresar, no para alcanzar la perfección
Si la
idea de tener demasiadas cosas para hacer te resulta estresante, separa las
tareas. Fija objetivos para cada día y haz una tarea a la vez. Trata de hacer
una lista de cosas para hacer durante el día o ten en mente las cosas que has
logrado durante el mismo. Lograr algo siempre hace que uno se sienta bien. Al
organizar tus tareas diarias, puedes ver con claridad lo que has hecho en un
día. Uno siempre se siente bien al lograr algo, incluso si es una pequeña
tarea. Todas las actividades, tanto las grandes como las pequeñas, contribuyen
a la vida haciéndola satisfactoria.
5.
Enfócate en soluciones, no en problemas
Trata de
no enfocarte mucho en lo negativo. Si descubres que te sientes abrumado por
todo lo que tienes que hacer en el trabajo y por todos los problemas que
emergen en la vida diaria, vuelve a enfocarte y busca soluciones a tus
problemas. Esta solución puede ser un objetivo a largo plazo, pero tener algo
en lo que trabajar y enfocar tu energía te mantendrá encaminado en una
dirección positiva.
6. No
critiques tus decisiones
Criticar
constantemente tus decisiones puede causar mucho estrés y ansiedad. Si tu
elección no produce el resultado esperado, no te quejes. Hasta donde sabes, el
“camino descartado” podría haber llevado a un resultado peor. En lugar de
criticar tus decisiones, tómate el tiempo para reevaluar la situación y
encontrar una solución alternativa. Quejarte sobre algo que está fuera de tu
control no acelerará tu arribo a una solución real.
7. Pide
ayuda
No temas
acercarte a tu familia, amigos y colegas para recibir ayuda. No somos “islas”.
Apóyate en las personas que te rodean, permite que te levanten el ánimo cuando
no puedas hacerlo solo. No te avergüences de pedir; todos necesitamos ayuda en
un momento u otro. Las personas de tu vida a quienes realmente les importas
desean que tengas éxito y vivas una vida feliz. Rodéate de personas positivas y
su energía positiva creará un efecto dominó que se extenderá hasta ti.
8.
Mantente activo en tu comunidad
Somos
seres humanos y necesitamos interacción social. Estar involucrado en tu
comunidad puede ser una actividad positiva que te recargue mentalmente y
elimine el estrés del trabajo. También la familia brinda una valiosa sensación
de pertenencia. Encontrar una actividad para que tu familia haga en grupo
fortalecerá el lazo y creará recuerdos positivos a los que todos podrán
recurrir en los momentos difíciles. Tu sentido de pertenencia a una comunidad
no tiene que venir de la familia; es bueno unirse a cualquier grupo. Hay muchas
comunidades diferentes en las que puedes involucrarte, como clubes de lectura,
equipos deportivos, centros comunitarios y grupos religiosos. Permanece
conectado y activo en tu comunidad, cualquiera que sea.
9.
Recuerda ser agradecido por lo que tienes
No te
quejes de tu trabajo, tu jefe o tus compañeros. En lugar de quejarte, haz algo
para sentirte mejor sobre ti mismo. Denigrar a los demás no aliviará tu estrés
ni te hará más feliz. Guardar rencor nunca vale la pena. Recuerda todas las
cosas buenas que tienes en la vida y agradece siempre por ellas. El secreto de
la felicidad es simplemente elegir esa postura mental. Tienes en tu interior el
poder para dar ese primer paso y comenzar a pensar de manera positiva.
10.
Encuentra un balance
La vida
no puede ser sólo trabajo, y desafortunadamente tampoco puede ser sólo juegos.
La clave para ser feliz y exitoso es encontrar un balance entre ambos. Necesitamos
tanto sobrevivir como florecer. Trabajar es necesario por razones obvias,
incluyendo cuentas, alquiler/crédito hipotecario y gastos diarios. Trabajar
todo el tiempo agota el cuerpo; cuidarte es tan importante como ganar dinero.
Recuerda separar tiempo para disfrutar actividades y compartir con personas a
quienes aprecias.
La
felicidad es contagiosa. Si quieres ser feliz, de ti depende lograrlo. Cuando
seas una persona realmente feliz, emitirás una energía positiva y los demás lo
advertirán. Trata de compartir ese sentimiento con quienes te rodean,
particularmente en un entorno laboral estresante. El estrés no es bueno para
nadie y hace que las personas sean más enojonas, que tomen malas decisiones,
que no puedan dormir bien e incluso causa problemas de salud aún más serios.
Utiliza las estrategias anteriormente mencionadas para lidiar con el estrés en
el trabajo, encontrar un balance adecuado entre trabajo y vida privada, y
volverte una persona más feliz y optimista. ¡Tu nivel de estrés y tus colegas te
lo agradecerán!
Extraído
del libro de Harry Edelson: Positivismo, cómo ser más feliz, más saludable, más
inteligente y más próspero.
Con mucho cariño,
Noel y Silvia
Ya empacados – y estresados - para viajar hacia “La Porciúncula”
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